La Decisión pretende reforzar el liderazgo digital de la UE promoviendo políticas digitales integradoras y sostenibles al servicio de los ciudadanos y las empresas. Para ello, establece metas digitales concretas que la UE y sus Estados miembros se proponen alcanzar de aquí al final de la década en cuatro ámbitos de actuación:
- el refuerzo de las capacidades digitales y la educación,
- la seguridad y la sostenibilidad de las infraestructuras digitales,
- la transformación digital de las empresas,
- la digitalización de los servicios públicos.
El programa introduce una nueva forma de gobernanza basada en la cooperación entre los Estados miembros y la Comisión para garantizar que la Unión cumpla conjuntamente sus aspiraciones. La iniciativa permitirá a los países de la UE colaborar estrechamente y poner en común recursos para lograr avances en el ámbito de las capacidades y las tecnologías digitales que los Estados miembros no podrían alcanzar por sí solos. El objetivo último es lograr una transformación digital que empodere a los ciudadanos y a las empresas, en consonancia con los valores de la UE.
En la Decisión se aclaran varias definiciones de los objetivos generales del programa, haciéndose hincapié en el refuerzo de los derechos fundamentales, la transparencia y la seguridad, y en la promoción de las capacidades digitales. Para alcanzar estos objetivos comunes, los Estados miembros trabajarán conjuntamente, evaluando los progresos y adoptando las medidas necesarias.
La Comisión establecerá trayectorias a escala de la UE para cada uno de los objetivos digitales de la Unión, junto con los Estados miembros. Estos, a su vez, elaborarán trayectorias nacionales y hojas de ruta estratégicas para alcanzar estos objetivos hasta su revisión, prevista en 2026. Los avances se supervisarán sobre la base del Índice de la Economía y la Sociedad Digitales y se evaluarán en el informe anual de la Comisión sobre el «estado de la Década Digital ».
La Decisión también desarrolla el concepto de los proyectos plurinacionales, que también facilitan la cooperación y las inversiones comunes para contribuir a la consecución de los objetivos. Se trata de proyectos a gran escala que agrupan recursos de la UE, nacionales y privados, para lograr avances que ningún Estado miembro podría conseguir por sí solo.
El programa facilitará las inversiones en ámbitos como la informática de alto rendimiento, la infraestructura y los servicios comunes de datos, la cadena de bloques, los procesadores de baja potencia, el desarrollo paneuropeo de corredores 5G, la asociación en materia de alta tecnología para las capacidades digitales, la infraestructura cuántica segura y la red de centros de ciberseguridad, la administración pública digital, las instalaciones de ensayo y los centros de innovación digital.
La Decisión prevé también un mecanismo de cooperación eficaz entre los Estados miembros y la Comisión para alcanzar los objetivos del programa.