La red temática Share-PSI 2.0 nacía en este marco, reuniendo a un nutrido número de agentes especializados en el campo, procedentes de veintiocho países europeos , con los objetivos de identificar buenas prácticas y asesorar sobre estándares abiertos en la implementación de la Directiva Europea sobre la Reutilización de la Información del Sector Público (RISP) para, así, mejorar la interoperabilidad y armonización; asegurar que dicha aplicación se adapte a cada marco legislativo y cultural a escala nacional; garantizar los intereses comerciales de esta provisión técnica, brindando especial asesoramiento sobre el cálculo y cobro de costes marginales; e informar acerca del desarrollo de estándares técnicos relevantes que cumplan las necesidades de los estados europeos.
En este contexto, Share-PSI 2.0 ha lanzado un documento que recopila una serie de buenas prácticas que sirvan de orientación a todas las organizaciones públicas que cumplen con la Directiva de la Comisión Europea; al mismo tiempo que amplía y contextualiza las mejores prácticas de datos en la web del W3C ayudando a maximizar el potencial de la reutilización. Gracias a este proyecto, se ha recopilado la experiencia de los miembros de la red y se comparte el conocimiento adquirido a través de los talleres, iniciativas, casos de éxito y guías de implementación que lleva a cabo la entidad.
Metodología de selección de buenas prácticas Share-PSI 2.0
El proceso seguido por la red temática para identificar y seleccionar las mejores prácticas se ha basado en cinco etapas cuyo punto de partida son los estudios y experiencias que intercambian los participantes en los diferentes eventos organizados periódicamente por Share-PSI 2.0.
En primer lugar, se han recopilado las historias compartidas en los talleres donde los moderadores recogieron toda la información relevante para, posteriormente, identificar las experiencias y crear una primera propuesta. Un consejo editorial, formado por algunos de los miembros de la red, analizó el material y creó una propuesta inicial de aquellas buenas prácticas destacadas y diferentes del resto.
Por último, a través del voto de los miembros del Share-PSI 2.0, se ratificó el listado de buenas prácticas y aquellas que registraron un apoyo superior al 80% de la red (un total de 48) se clasifican incluyéndose dentro del documento. Aquellas prácticas descartadas y otras experiencias recogidas en eventos posteriores se han incluido como diez recomendaciones adicionales en un anexo para así completar el listado original.
Visión general de las buenas prácticas del Share-PSI 2.0 y W3C
Segmentadas en veintiún categorías, las buenas prácticas de Share- PSI 2.0 recogen iniciativas, casos de uso, historias reales y proyectos de diversa índole que incluyen desde ideas de crowdsourcing para la reutilización de la información, ejemplos de ecosistemas open data, estándares de datos geoespaciales o proyectos de apertura en sectores como el transporte, la investigación y el emprendimiento.
Todas las buenas prácticas siguen un mismo esquema para facilitar su comprensión y aplicación por otros organismos públicos europeos. De esta manera, en cada uno de ellos se explica el reto al que dan respuesta, los motivos para su selección y recomendaciones para su implementación, así como los casos reales donde se ha llevado a cabo en la Unión Europea y cuáles son las buenas prácticas relacionadas.
España ocupa un lugar destacado dentro de los países referenciados en el informe con veintiséis buenas prácticas que incluyen desde portales de datos abiertos como la plataforma regional Open Data Canarias , a normativas específicas como la ley de reutilización del País Vasco , materiales de apoyo como la guía metodológica para planes open data sectoriales elaborada por la Iniciativa Aporta o el manual para una Universidad Abierta desarrollado por la CRUE-TIC, entre otros.
Cabe destacar que las buenas prácticas desarrolladas por el Share-PSI 2.0 y aquéllas elaboradas por el grupo de trabajo del W3C se complementan mutuamente; estas últimas se centran en los aspectos técnicos del intercambio de datos en la web, excluyendo cualquier cuestión política que sí tiene cabida en el documento de la red temática. No obstante, desde el punto de vista de la aplicación de la Directiva, ambos conjuntos de buenas prácticas debe tenerse en cuenta como uno solo y, por este motivo, la guía del Share-PSI 2.0 relaciona y considera las treinta y cinco best practices del W3C relacionadas con los diferentes elementos de la normativa europea RISP.
La guía de buenas prácticas diseñada por Share-PSI 2.0 es lo suficientemente completa para que pueda aplicarse tanto en entornos nacionales como locales de toda la Unión Europea. Teniendo en cuenta que el estado y nivel de madurez de datos abiertos en la UE es bastante heterogéneo, las prácticas recomendadas por la red pueden convertirse en fuente de inspiración para cada país con el fin de optimizar el ecosistema open data nacional y seguir avanzando en la aplicación de la Directiva RISP.
Fuente original de la noticia (datos.gob)
Fuente original de la noticia (W3C)