El ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública ha anunciado una gran reforma de la Administración, centrada en los ciudadanos y en la mejora de los servicios que reciben, y preparada para el desafío digital. En definitiva, una Administración del siglo XXI tan potente como los retos a los que se enfrenta.
Según palabras del ministro, existen otras palancas sobre las que se está construyendo esa modernización de la Administración, como es la ley de Función Pública, actualmente en trámite parlamentario, y el proyecto de 'Consenso por una Administración Abierta', que diseña la hoja de ruta de la transformación con una metodología innovadora y participativa.
Asimismo, el titular ha querido destacar la subida del salario de los empleados públicos en un 14.9% desde 2018, la disminución de la media de edad de la plantilla, que se sitúa actualmente en los 50 años, o la reducción de la brecha de género con una fuerza laboral pública en la que el 60% son mujeres. “Pero todavía queremos hacer más, mucho más. El Gobierno de España quiere una Función Pública dinámica, digitalizada, cercana y eficaz. Una Administración del siglo XXI tan potente como los retos a los que nos enfrentamos”, ha asegurado el ministro.
El ministro ha subrayado el doble papel del Ministerio, que cuenta con la transformación digital y la experiencia de la Administración General del Estado. “De ahí los más de 6.500 millones de euros del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia para digitalizar entidades como el SEPE, para mejorar la ciberseguridad del Estado o para desarrollar servicios públicos basados en datos”.
La jornada, que ha sido inaugurada por la secretaria de Estado de Función Pública, está enmarcada en los actos de celebración de los 50 años de España en libertad y de la Semana de la Administración Abierta de 2025.
