Como ha señalado el Presidente de la Comisión
, Jean-Claude Juncker, la Iniciativa WiFi4EU contribuirá a que "todos los pueblos europeos y todas las ciudades tengan acceso gratuito a Internet inalámbrico en los principales centros de la vida pública para 2020".
El Vicepresidente a cargo del Mercado Único Digital, Andrus Ansip, dio la bienvenida al acuerdo y comentó a los medios que la estrategia del Mercado Único Digital tiene como objetivo construir una Europa plenamente conectada donde todos tengan acceso a redes digitales de alta calidad. La Iniciativa WiFi4EU mejorará la conectividad en particular donde el acceso a Internet es limitado WiFi4EU es un primer paso bienvenido. Pero aún queda mucho por hacer para lograr una conectividad de alta velocidad en todo el territorio de la UE -como mejorar la coordinación a nivel europeo del espectro y estimular las inversiones en el sector de alta tecnología- en palabras del Vicepresidente.
El acuerdo político incluye el compromiso de las tres instituciones de garantizar que se asignará un importe global de 120 millones de euros para financiar equipos para servicios públicos de Wi-Fi gratuito en 6.000 a 8.000 municipios de todos los Estados miembros. Las fuentes específicas de financiación se finalizarán en los debates legislativos en curso sobre la revisión del actual programa marco financiero plurianual. Las autoridades locales podrán solicitar financiación una vez que se cree el sistema.
En la práctica, las autoridades públicas locales (municipios o grupos de municipios) que deseen ofrecer Wi-Fi en áreas donde aún no existe una oferta pública o privada similares podrán solicitar financiación a través de un proceso simple y no burocrático. Una subvención asignada en forma de cupones se utilizará para comprar e instalar equipos de última generación, es decir, puntos de acceso inalámbricos locales, mientras que la autoridad pública cubrirá los costos de funcionamiento de la conexión en sí.
La Iniciativa WiFi4EU, anunciada por el Presidente Juncker en su discurso sobre el estado de la Unión en septiembre de 2016, forma parte de la ambiciosa revisión de las normas de la UE sobre las telecomunicaciones, incluyendo nuevas medidas para satisfacer las crecientes necesidades de conectividad de los europeos y aumentar la competitividad de Europa.
